Atizapán de Zaragoza, Méx.- El Gobierno de Atizapán de Zaragoza, a través de la Dirección de Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano, verifica que las construcciones cumplan con las normas dispuestas en el Plan Municipal de Desarrollo Urbano, como la incorporación de sistemas de captación, tratamiento y aprovechamiento de agua pluvial y accesorios ahorradores de agua que permitan reducir en al menos un 30% la demanda de agua de la red municipal.
Sobre ello, el Director de Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano de Atizapán de Zaragoza, José Ramón Jarquín Rodríguez, expresó que, a la llegada de la actual Administración, encabezada por el Alcalde Pedro Rodríguez Villegas, se continuó con el proceso de conformación del Plan Municipal de Desarrollo Urbano y paralelamente la demarcación enfrentó una disminución del suministro de agua que le envía la CAEM y la CONAGUA debido a la crisis hídrica, situación que obligó a tomar medidas al respecto.
“Todos los nuevos fraccionamientos que están en proceso de construcción ya son autorizaciones de años atrás, incluso algunos de más de 20 años, como es el caso de Bella Vista, entre otros. Sin embargo, la realidad ha cambiado en materia de agua y la gente ha manifestado el por qué si ya hay poca disponible, se siguen autorizando nuevas construcciones. Lamentablemente ya es un derecho adquirido que se tiene en muchos casos y no tenemos jurídicamente los elementos para negarlos.
“Lo que sí tenemos es la capacidad de regular el impacto hídrico que van a tener las nuevas construcciones. De ahí se establecieron medidas en el Plan Municipal de Desarrollo Urbano, como la obligatoriedad de incorporar sistemas de captación y aprovechamiento de agua de lluvia y sistemas ahorradores de agua que permitan una disminución por lo menos del 30 por ciento de la demanda de agua de red por construcción”, puntualizó Jarquín Rodríguez.
También destacó que, en buena parte de la estrategia hídrica, el Municipio tendrá que sostenerse temporalmente a través de pozos, los cuales actualmente proporcionan el 20 por ciento del líquido que se consume en la demarcación.
“Sin embargo, el problema radica en que hace apenas 30 años encontrábamos agua a 120 metros de profundidad promedio y hoy, estamos encontrándola a 400 o 450, entonces significa que estamos agotando las fuentes subterráneas de agua y dada la situación ahorita nos vemos obligados a extraer más agua, por ello es fundamental establecer estrategias para reponer el volumen extraído”
El estrés hídrico por definición es cuando consumimos más de la que estamos recuperando. Es por ello por lo que se determinó que las construcciones tengan un área verde permeable, que tenga la capacidad de reinfiltrar agua al subsuelo”, puntualizó.
Por otra parte, también dijo que este tipo de medidas contribuirá al control de inundaciones a la vez que permitirá la recarga de los mantos acuíferos subterráneos.
“Ahorita, por la exigencia de la ciudadanía e instrucción del Presidente, tenemos que ser mucho más estrictos en garantizar que las construcciones que se autorizaron con el nuevo Plan Municipal de Desarrollo Urbano, publicado en septiembre de 2022, cumplan con estas medidas, por lo que estaremos haciendo visitas de verificación y se suspenderá toda obra que no cumpla con estas medidas”, agregó Jarquín Rodríguez.
Finalmente expresó que superar la falta de agua es un trabajo de todos e invitó a las personas a implementar estas medidas de sustentabilidad hídrica en las construcciones nuevas y las ya existentes.
Y extendió una invitación a la ciudadanía a acudir a las oficinas de la Dirección de Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano ubicadas en el Palacio Municipal, para recibir asesorías técnicas de las 9:00 a las 18:00 horas, de lunes a viernes.