Gilberto Owen es uno de los deslumbrantes escritores del grupo Contemporáneos. Nació en Sinaloa en mayo de 1904, pero la mayor parte de su vida es un misterio, debido a los pocos documentos oficiales fidedignos y al persistente afán del poeta de mitificar su propia existencia, afirma el escritor e investigador universitario Heber Quijano en su artículo “Una voz por cada puerto. Las resurrecciones de Gilberto Owen”, publicado en la revista Universitaria.
En su texto, destaca la importancia del autor, quien escribió una de las primeras novelas líricas (Novela como nube, 1928), uno de los primeros poemarios en prosa (Línea, 1930), así como un poemario que aún hoy tiene resonancia, Perseo vencido (1948), que incluye “Sinbad El Varado” y “Libro de Ruth”, además de una recopilación de cartas estremecedoras a la actriz Clementina Otero. Y se codeó con personajes de su mismo calibre, por ejemplo, fue traductor y actor del Teatro Ulises, patrocinado por Antonieta Rivas Mercado.
Gilberto Owen, se dice en el texto, entró al servicio exterior asignado a Nueva York, Detroit, Cincinnati y Lima, donde coincidió con el movimiento de la antiimperialista Alianza Popular Revolucionaria Americana; sin embargo, fue expulsado por no cumplir los protocolos.
De su trabajo literario dan cuenta su paso por el Instituto Literario del Estado de México y su archivo, donde está documentada su participación en revistas de Toluca.
Heber Quijano concluye que dan noticia de la ubicación de la tumba de Owen la novela Los ingrávidos, de Valeria Luiselli y Vicente Quirarte.
Para saber más de este reconocido poeta, su nombre original y otros detalles poco claros, se puede consultar el último número de la revista Universitaria:
https://revistauniversitaria.uaemex.mx/article/view/21254/15752